Historia
En 1886 Pedro Otaegui y Emilia Malkorra, abrieron una cerería confitería en San Sebastián. Precisamente el año siguiente en que la reina regente María Cristina decidiera trasladar a la capital gipuzkoana su residencia veraniega, con lo que comenzó a ser frecuentada por la aristocracia, que se acrecentó con la llegada de gran número de europeos que huían de la guerra de 1914-16. Entre ellos algunos pasteleros que posiblemente entraron a trabajar a Casa Otaegui, y fueron los que animaron a crear la pantxineta, una recreación, con variantes, principalmente en su relleno, de la tarta de origen italo-francés del siglo XVI, el franchipán o frangipane, bautizado así en honor a un nombre italiano.
Libro Cinco docenas de pasteles. Autor: Juan José Lapitz (†)